Buenas!
Pasada la Navidad (y bien pasada además) toca retomar la vida sana, hacer todo lo posible por deshacerse de los kilos de más antes del verano y, para nosotros lo más importante, poner en orden nuestra alimentación tras tanta fiesta, tanto brindis y tantas comidas copiosas con sus deliciosos y tradicionales postres.
Pero lo cortés no quita lo valiente y el volver a respetar la pirámide alimenticia no significa que uno no pueda comer un buen postre en familia en domingo. Así que toca buscar postres que estén igual de buenos pero que sean más sanos, menos calóricos y más fáciles de digerir (por aquello de no volver a caer en la pesadez de estómago de días atrás)... Sí, es posible.
Hoy les traemos una receta de las de toda la vida, que además es tan sencilla como económica, que nos saca de la rutina de comer un simple yogur o una pieza de fruta fresca (que están buenísimos pero estamos hablando de un domingo y eso hay que respetarlo jejeje) y que cumple perfectamente la función que debe tener un buen postre: poner un punto final dulce a nuestras comidas.
Además si no nos pasamos con el azúcar y la mantequilla, este puede ser bien un postre para una dieta de adelgazamiento.
Además si no nos pasamos con el azúcar y la mantequilla, este puede ser bien un postre para una dieta de adelgazamiento.
Hoy les dejamos con nuestra forma de hacer unas deliciosas Manzanas asadas.
Tan sencillo y tan bueno... |
*Nota: para hacer esta receta (o cualquier otra de que contengan manzanas) suelen utilizarse de la variedad Reineta. Sin embargo, dichas manzanas solo pueden encontrarse frescas durante unos meses (cuando están de temporada) así que para poder cocinar manzanas el resto del año se suele utilizar la variedad Golden, que es con la que nosotros hemos elaborado esta receta.
Ingredientes:
6 manzanas
6 cucharaditas de azúcar
2 ramas de canela
Dos cucharadas de mantequilla
Una rama de vainilla
Un buen pedazo de corteza de limón
Una cucharada colmada de pasas
Medio vaso de ron miel
Elaboración:
Para empezar debemos meter las pasas en el vaso de ron durante un ratito con el fin de rehidratarlas. Precalentamos el horno a 200º, con calor arriba y abajo y la bandeja en la posición central.
A continuación lavamos bien las manzanas, las descorazonamos teniendo mucho cuidado de que no se rompan y les hacemos un corte por el medio (alrededor de la manzana) con el fin de que no estallen dentro del horno.
Colocamos las manzanas boca arriba en una fuente de horno. Rompemos cada rama de canela en tres pedazos (más o menos) e introducimos dentro de cada manzana un puñadito de pasas, media cucharadita de azúcar, un poco de mantequilla y la canela.
Por último bañamos las manzanas con el ron que habíamos utilizado para rehidratar las pasas e incorporamos el resto del azúcar (por encima de las manzanas), la corteza de limón y la rama de vainilla (previamente abierta y desgranada).
Cocinamos las manzanas a 200º durante aproximadamente media hora o hasta que estén tiernas. Retiramos del horno y dejamos reposar las manzanas hasta que se templen un poco.
Podemos acompañarlas de chocolate, nata, caramelo, miel,... Espolvorear un poco de azúcar o comerlas así tal cual pero siempre templadas.