Buenas!
Cuando era niño mi madre solía sorprenderme de vez en cuando, trayéndome un pan con chocolate para la merienda. La verdad es que no se si quiera donde lo compraba, seguramente en alguna panadería entre la Plaza de Gipuzkoa y el Antiguo Boulevard.
Recuerdo que no era dulce, era pan pan, pero tenía tropezones de chocolate. Me lo traía envuelto en un pedazo de papel blanco. Quizás ni siquiera era tan bueno como lo recuerdo.
Eran esos días, cuando eres niño y no sabes lo que es la prima de riesgo y el Euribor te importa un comino… todas esas cosas de mayores que para mi no existían. Pero para mi amatxo sí que eran cosas importantes. Sin embargo ella sacaba un ratito y, de vez en cuando, me alegraba la tarde trayéndome un pan con chocolate para la merienda.
Ahora soy adulto y todas esas cosas me traen a mí de cabeza. Por eso he querido hacer un pan parecido al que me traía la ama. Para recordar lo feliz que se es cuando no tienes preocupaciones y para ofrecérselo a mi hija, no todo los días, de vez en cuando como lo hacía mi amatxo conmigo.
Quizás este pan que hemos hecho no se parezca al que comía cuando era niño. Quedó muy bueno, con el punto justo de pomelo y de chocolate. Con una corteza super suave y una miga espectacular. Pero me ha servido para rememorar aquellos días. Además, cuando se lo ofrecía Lucia, me dedicó una sonrisa que seguro se parecía a la que le regalaba yo a la amá. Misión cumplicada, lo que yo buscaba, con eso ha sido más que suficiente.
Para mi sinceramente este es un recetón! Espero que para vosotros también lo sea!
Pan con chocolate y pomelo (con masa madre) |
*Nota: esta receta está basada la receta de Pan con chocolate y naranjaque hemos sacado de www.panarras.com una web ideal para los que gustan de hacer pan en casa. Perfecta para que los disfrutan amasando, para los verdaderos panarras (como su nombre indica).
Hemos hecho algunas modificaciones, sustituyendo el poolish que lleva la receta original por masa madre, y la naranja confitada por pomelo confitado.
El Chef Panarra recomienda comerlo 12 horas después de sacarlo del horno y nosotros confirmamos que al día siguiente este pan está todavía más bueno. Gracias Chef Panarra!
Ingredientes:
200 gr de Masa madre
150 gr de harina de fuerza
150 gr de harina común
140 gr de agua
50 gr de chocolate negro (en trozos medianos)
50 gr de pomelo confitado
20 gr de aceite de oliva virgen extra
7 gr de sal gruesa
4 gr de levadura fresca prensada
Elaboración:
Para empezar ponemos todos lo ingredientes secos (las harinas, la sal y la levadura desmenuzada) en un recipiente amplio y los mezclamos, y todos los húmedos (Masa madre, agua y aceite) en otro recipiente más pequeño y los mezclamos también.
Agregamos los ingredientes líquidos a los secos y mezclamos hasta que todos los ingredientes estén integrados.
Untamos la mesa con un poco de aceite y amasamos durante aproximadamente 5 minutos, hasta obtener una masa correosa y suave.
Extendemos la masa sobre la mesa, formando un rectángulo y ponemos tanto el chocolate como el pomelo sobre ella. Apretamos con los puños para que se integre todo en la masa.
Doblamos la masa horizontalmente en tres, de la siguiente manera: primero el tercio izquierdo lo doblamos hacia el centro y luego cubrimos con el tercio derecho. Y hacemos la misma operación verticalmente, obteniendo así un cuadrado pequeño con el que formaremos una bola.
Ponemos la masa en un bol untado con aceite y la dejamos reposar tapada durante aproximadamente 2 horas y media (hasta que más o menos haya doblado su volumen inicial).
Dividimos la masa en porciones (nosotros hicimos 5 panecillos) y se hace una bola con cada uno de ellas.
Ponemos los panecillos sobre la bandeja de horno cubierta con papel vegetal, los espolvoreamos con algo de harina (muy poca) y los tapamos con el trapo de panadero.
Dejamos reposar otra hora y media más o menos.
Precalentamos el horno a 210º centígrados con calor arriba y abajo.
Hacemos un corte en la superficie del pan e introducimos en el horno. Cocinamos a 220º durante 15 ó 20 minutos, hasta que estén dorados, los primeros 5 minutos podemos rociar un poco de agua con vaporizador un par de veces para así obtener una corteza mejor (opcional).
Retiramos del horno y dejamos reposar sobre una rejilla hasta que estén fríos (si podemos aguantar sin probarlos lo cual es complicado).
Buen provecho!