Buenas!
Como ya sabrán los que nos siguen con asiduidad, este fin de semana los Tartufo hemos estado en Madrid dando un curso de pan en Acaramelada.
Era nuestro "bautismo" como docentes y más aún en lo que al pan se refiere. Y ya se sabe que no somos panaderos profesionales pero sí que somos unos grandes "panarras" en toda la grandeza de la expresión, es decir, unos panaderos caseros de aupa, amantes de lo que se ha dado a llamar "pan de verdad".
Pues hoy queremos contarles que tal nos ha ido en nuestro curso. Por cierto, que otro día les hablaremos de lo bien que hemos comido en Madrid (pero ese ya es otro cantar).
Mi primera sensación (habla el Señor Tartufo en primera persona) fue la de nerviosismo extremo. Antes de y en los primeros momentos del curso. Me daba miedo no saber expresarme, no lograr transmitir lo que quería, que nos les pareciera interesante, que no me diera tiempo de elaborar las tres recetas previstas, que los "alumnos" no fueran receptivos... Y sobre todo... Quedarme mudo, que no me salieran las palabras y que en vez de que lo que quisiera decir, me salieran muletillas en plan "si tal cuando tal pues le añadimos más tal" o cosas similares que a uno le salen cuando le falla la verborrea.
Pues la verdad es que al principio fue un poco así pero he de agradecer tanto a los alumnos como a las "acarameladas" el facilitarme tanto las cosas. Cuando tienes gente abierta, con ganas y predispuesta a aprender (en el caso de los alumnos) y ayudar y colaborar en todo (en el caso de las Acarameladas)... Lo normal es que todo vaya sobre ruedas.
Llegados a este punto quisiera decir tres cosas:
- que dar este curso ha sido una experiencia inolvidable que estaré encantado de repetir (corren rumores de que para septiembre u octubre)
- que las "acarameladas" son una gente estupenda que nos alegramos muchísimo de haber conocido, que nos han recibido con los brazos abiertos. Que además tienen un local maravilloso, un sitio que realmente encanta con solo verlo y que además allí elaboran cosas preciosas... Pura fantasía.
- que lo hemos pasado genial en Madrid y que nos hubiera gustado quedarnos unos días más. Pero hemos continuado con la ruta y ya estamos en Donosti con la familia (pero eso también es otro cantar).